Tomar el sol, bañarnos y nadar un rato, jugar con palas de playa… y comer mal. Estos son algunos de los hábitos que solemos llevarnos a la playa todos los veranos, sobre todo el último. Y es que cuando bajamos con nuestra sombrilla, nuestras toallas y nuestra nevera de playa, muchas veces lo que hemos puesto dentro dista mucho de ser equilibrado y sano. Darse el capricho un día de comer a base de snacks o productos muy calóricos no tiene por qué tener consecuencias negativas para nuestra salud, pero hacerlo todos los días sí provoca que, a la larga, nuestro cuerpo (y nuestro peso) se resientan.
Sin embargo, hay solución. En Buenmercadoacasa pensamos que pasar el día en la playa no tiene por qué ser sinónimo de comer mal o con muchas calorías y, fieles a este pensamiento, hoy te traemos hasta nuestra sección de cocina unas cuantas ideas frías para que llenes tu nevera y tus tuppers playeros con tentempiés sanos, deliciosos y sencillos de preparar.
- Brocheta de aguacate, queso fresco y langostinos: delicioso y tan sencillo como comprar los langostinos ya cocidos, darles un golpe de calor en casa, dejarlos enfriar de nuevo y montar la brocheta con el aguacate y el queso. Puedes tomarla tal cual o regarla con un poco de aceite de oliva virgen extra o vinagre de módena. A tu gusto.
- Sándwich de plátano, queso de untar y miel: además de aportar proteínas y calcio gracias al queso de untar, el potasio del plátano te dará un extra de energía y la miel, el dulzor que necesitas si quieres que el sándwich sea un poco más dulce. También puedes sustituir el queso por un poco de mantequilla de cacahuete. Y si lo quieres un poco más ligero, que el queso de untar sea light.
- Milhoja de manzana y mango: ya sabes en lo que consiste una milhoja. Lamina una manzana y un mango y ve intercalando capas hasta que obtengas una milhoja de unos tres dedos de alta. Prepara un almíbar de miel (disuelve una cucharadita de miel en medio vaso de agua) y riega la milhoja con él. También puedes intercalar un poco de queso batido entre capa y capa de fruta.
- Tomates cherry rellenos de queso blanco: bate media tarrina de queso blanco hasta obtener una crema moldeable y luego viértela en una manga pastelera manual. Quita la parte de arriba a los tomates cherry, vacíalos un poco y rellénalos con el queso. Puedes poner un poco de orégano o de hierbabuena por encima. Y si te atreves, unas nueces picadas.
- Sándwich de queso con tomate: mezcla en una batidora de vaso una tarrina de queso de untar que tenga mucha consistencia con un tomate especial para untar tipo Roseta que previamente hayas cortado en trozos y quitado el tallo. Obtendrás una crema deliciosa y consistente, perfecta para este sándwich diferente y muy rico.
- Garbanzos tostados: este snack lo tiene todo. Es casero, bajo en calorías, está delicioso y se prepara de manera muy sencilla. Sólo tienes que poner a remojo un kilo de garbanzos un día antes de hornearlos. Cuando lo vayas a hacer, escúrrelos bien y rebózalos en una mezcla de especias que te gusten (puedes ponerles curry, canela, cúrcuma, comino molido, cayena, pimentón dulce o picante o pimienta negra). Luego, extiéndelos en una bandeja de horno sobre papel vegetal a 200 grados entre 30 y 45 minutos. Déjalos enfriar y guárdalos en un bote. Así cuando bajes a la playa, podrás llevarte unos cuantos y disfrutar de ellos frente al mar.
- Tiras de pechuga de pollo con rodajas de berenjena: hazlos ambos a la plancha. Para que la berenjena quede perfecta, recuerda que las rodajas deben ser de medio centímetro como mucho. También puedes acompañar el pollo con rodajas de calabacín a la plancha.
- Bocaditos de lassi de frutas: para preparar este postre delicioso necesitarás yogures naturales (mejor si son de tipo griego. Pueden ser desnatados), miel o azúcar moreno y frutas a tu elección. Por ejemplo, te sugerimos que los hagas de picotas, papaya y mango. Pela y trocea la fruta por separado y mezcla cada pieza de fruta con un yogur en el vaso batidor y dos o tres cucharadas de azúcar o miel. Llena una cubitera con la mezcla de cada fruta y ponlas todas a enfriar en el congelador. Cuando estén congeladas, desmolda y tendrás deliciosos bocaditos de fruta muy originales.
Y tú… ¿qué sueles llevarte para comer a la playa? ¿Apuestas por la cocina sana o te pierden los snacks calóricos? ¿Has probado alguna de nuestras sugerencias? Cuéntanos en los comentarios y comparte con nosotros tus ideas. En Buenmercadoacasa, tu opinión es importante.